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En una colección de co-creación con tres diseñadores de accesorios; La Libertad (joyería y estampados), Natalia Melguizo (bolsos) y Oropéndola (piezas en tejido macramé), Andrés Pajón busca depurar su identidad de marca, mientras la potencializa con alianzas estratégicas.
Fiel a la sensualidad, a la gala y a la exuberancia, para Colombiamoda 2016, Andrés Pajón le apostó y se arriesgó a crear piezas básicas de celebración.
El vestido negro largo, el rojo con escote profundo, el corte sirena, la túnica o kaftan, el de un solo hombro, el vestido toga y el “slip dress” estuvieron ahí como lienzos que se dejaban adornar por la maestría de los colegas, sin embargo la critica no se hizo esperar cuando argumentó que la fuerza de la colección estaba en los accesorios y estampados de los invitados y no en los diseños de Pajón.
Sin embargo, piezas emblemáticas como el vestido de cierre, tejido de macramé amarillo, los bustier tejidos con hilos encerados y el grafismo pop y salvaje acompañaron un excelente trabajo de cortes de seda opaca y brillante en vestidos y escotes, así como a las piezas artesanales diseñadas por Andrés y elaboradas a mano por los indígenas Emberá. Es de destacar ese trabajo artesanal, especialmente en los cinturones anchos, los aretes extra largos y en los brazaletes y la bufanda de color amarilla que llevaba una modelo sobre un “slip dress” blanco con detalles de cortes triangulares en el busto.
La invitación de Andrés Pajón a La Libertad, Natalia Melguizo y a Oropéndola, fue ser parte de una colección tribal y étnica que se ajustara a su ideal de marca de gala, además de aliarse nuevamente con expertos que le dieran dinamismo y contemporaneidad a su universo protocolario. Y es que las co-creaciones son excelentes como procesos de integración y de negocio, donde se crea una idea de gana-gana en un mercado de moda escaso y selectivo.
Es cierto que los accesorios de la colección, los estampados de jaguares y los vestidos de macramé se robaron toda la atención, pero no quiere decir que esta co-creación, de cuatro noveles talentos, no sea una posibilidad de aprendizaje y de negocio donde cada uno conoce su potencial e invita a otros no solo a empoderarse sino también a impulsarse entre sí.
Escrito por Catherine Villota
Vía Fashion Radical
www.fashionradicals.com
